Los mejillones son sanos, baratos y están buenísimos. Creo que lo que más pereza me da es ir a comprarlos porque el mercado me queda algo lejos y mi pueblo está lleno de cuestas, pero una tiene que hacer lo que tiene que hacer por unos buenos moluscos.
Esta receta es ideal si te has cansado de los mejillones al vapor con limón y te apetece tomarlos con una salsita bien buena. ¡Toma nota!
Mejillones con tomate y pimentón
Raciones: 2 personas
Preparación: 10 '
Cocción: 36 '
Total: 46 '
Ingredientes
- 1 kg de mejillones
- Un tarro de tomate natural triturado o troceado (suelen rondar los 700 g)
- 2 cebollas pequeñas
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimentón dulce o picante
- Una hoja de laurel
- Pimienta negra
Los mejillones y la salsa se preparan por separado. Puedes hacerlo incluso el día antes -conviene cocinar los mejillones el mismo día que se compran- y combinarlo justo antes de comer.
Mejillones al vapor
- Lava bien los mejillones bajo el grifo, elimina los restos de conchas con un cuchillo o un estropajo metálico y corta las barbas con unas tijeras. Descarta los que estén rotos y los que estén abiertos y no se cierren solos al darles un golpecito con los dedos.
- Pon los mejillones en una olla grande con tapa y añade medio vaso de agua y una hoja de laurel.
- Cocina a fuego medio-alto con la olla medio tapada (deja una rendija para que salga el vapor) durante unos 6 minutos o hasta que se abran los mejillones.
- Apaga el fuego y reserva.
- Descarta el líquido y los mejillones que no se hayan abierto.
Salsa de tomate
- Corta dos cebollas pequeñas y ponlas a rehogar en una sartén a fuego medio con 2 cucharadas de aceite de oliva.
- Cuando la cebolla esté translúcida (unos 5 minutos) añade un tarro de tomate natural triturado (unos 700 g).
- Añade una cucharadita de sal y cocina a fuego suave durante 20-30 minutos (20 si tienes prisa, con 30 quedará más rica). Coloca una tapa sobre la sartén para que no salpique tanto pero deja una ranura para que pueda salir el agua que se va evaporando.
- Remueve de vez en cuando.
- Apaga el fuego y añade los mejillones a la sartén de la salsa de tomate. Remueve con cuidado.
- Espolvorea por encima una cucharadita de pimentón y pimienta negra al gusto.
Te dejo aquí una versión parecida que publiqué en Instagram, con chili y cilantro.