Té verde: 10 beneficios para tu salud

El té verde es la auténtica bebida de la longevidad.

¿Y esto por qué? Pues porque es capaz de actuar sobre nuestro organismo a distintos niveles, favoreciendo su correcto funcionamiento y previniendo así la enfermedad.

¿Y qué es la longevidad, sino evitar morir antes de tiempo?

El té verde tiene tantísimas propiedades y es tan fácil de incorporar a tu vida que, cuando termines de leer este artículo, espero haberte convencido para que tú también te tomes una o dos tazas al día, más si quieres.

Beneficios del té verde

Cada vez son más los estudios que demuestran las propiedades del té verde. Algunas de las más destacadas son:

Es una excelente fuente de antioxidantes
El té verde contiene unos compuestos llamados catequinas, con un elevado poder antioxidante. Las catequinas son flavonoides, un tipo de polifenol. Estos compuestos pueden ayudar a proteger las células del daño oxidativo causado por los radicales libres, moléculas altamente reactivas capaces de sembrar el caos a nivel celular. La catequina más famosa y poderosa del té verde es la EGCG o galato de epigalocatequina, que cuenta ya con un montón de estudios publicados.
Reduce los niveles de inflamación
Justamente son estos niveles de EGCG presentes en el té verde los que parecen tener una acción antiinflamatoria, mediada por la supresión de citocinas inflamatorias y enzimas relacionadas con la inflamación.
Puede reducir el riesgo cardiovascular
El té verde puede ayudar a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular al ayudar a controlar la presión arterial, mejorar la función endotelial y favorecer un mejor perfil lipídico. Es capaz, además, de reducir la oxidación del colesterol LDL.
Puede ayudar a activar el metabolismo
Algunos estudios sugieren que el té verde puede aumentar la termogénesis e incrementar la quema de grasa. Al parecer el efecto se debe a una acción conjunta de la cafeína y las catequinas presentes en el té. Es decir, que el efecto no se debe únicamente a la cafeína como se podría suponer.
Favorece el correcto funcionamiento del sistema inmune
Los compuestos de té verde son capaces de modular el sistema inmunitario innato, el sistema inmunitario adaptativo y el sistema inmunitario intestinal, ofreciendo una acción de refuerzo integral sobre el sistema inmunológico.
Mejora la sensibilidad a la insulina
El té verde es capaz de reducir las concentraciones de glucosa en sangre y hemoglobina glicosilada (un marcador que indica cómo de caramelizados están tus tejidos), así como mejorar los niveles de insulina en ayunas. Menos glucosa en tu torrente sanguíneo y una mayor sensibilidad a la insulina es una buena idea si te interesa tu salud a largo plazo.
Mejora la memoria y la función cognitiva
El té verde mejora la memoria y la función cognitiva, al tiempo que contribuye a una mejor gestión del estrés gracias a su contenido en L-teanina, que parece equilibrar la acción excitante de la cafeína. Estudios epidemiológicos apuntan también a un efecto protector contra el declive cognitivo asociado a la edad y la demencia.
Protege el aspecto y la salud de la piel
Algunos estudios sugieren que el té verde previene el envejecimiento prematura de la piel, justamente gracias a su acción antiinflamatoria y antioxidante. Es capaz también de proteger la piel de los rayos UVB.
Tiene un efecto beneficioso sobre la microbiota intestinal
Los polifenoles del té verde pueden ser metabolizados por bacterias intestinales, lo que parece promover el crecimiento de algunas especies beneficiosas. Por otro lado, son capaces de dificultar el crecimiento de ciertas bacterias patógenas, contribuyendo así a un correcto equilibrio de la microbiota intestinal.
Tiene un efecto beneficioso sobre la microbiota bucal
Las catequinas del té verde previenen la reabsorción ósea e inhiben el crecimiento de bacterias asociadas con enfermedades periodontales, como la Streptococcus mutans, que causa la placa y contribuye a la caries dental.

cafeína en el té verde

Es importante recordar que el té verde contiene cafeína, entre 25 y 30 mg por taza. Esto es aproximadamente una tercera parte de la cafeína que contiene la misma cantidad de café, aún así, es mejor consumirlo solamente por la mañana.

De poco sirve perseguir los beneficios del té si olvidamos los de dormir.