AVISO

Este artículo no pretende hacer apología de ningún medicamento o tratamiento, y cualquier decisión alrededor de este tema debes consultarla con tu especialista.

contexto

Si nada cambia, en noviembre de 2025 seré oficialmente una mujer menopáusica: hará un año de mi última menstruación.

Sí, un pelín pronto (tengo 44 años), pero estas cosas van como van, y tienen además un fuerte componente genético (mi madre y mi abuela entraron en menopausia a una edad similar).

En realidad mi regla llevaba un par de años siendo errática (me venía 2 o 3 meses 'normal', entonces desaparecía durante otros 2 o 3 meses, etc.), y ya empezaba a experimentar algunos síntomas propios de la perimenopausia:

  • Sueño nocturno muy interrumpido y poco profundo. Facilidad para conciliarlo, pero despertares sobre las 3-4 de la mañana que me tenían en vela un par de horas.
  • Dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales). En mi caso era un dolor abrasivo, como de estrechamiento del canal. Perdón si esto es más información de la que esperabas leer sobre mi vida íntima.
  • Cistitis muy recurrentes, una al mes aproximadamente.
  • Cierta dificultad para concentrarme.
  • Piel más seca y a veces con picores inexplicables en los brazos.

Pero lo más preocupante para mí es que quedarme sin estrógenos tan joven es delicado a nivel óseo, cardiovascular y cerebral.

En realidad yo esto me lo veía venir, así que llevaba casi dos años leyendo y escuchando sobre la terapia hormonal para la menopausia*, de modo que llegué a este momento con una opinión bastante formada. Con miedo y dudas, como todo el mundo, porque este es un tema espinoso, pero bastante convencida de que, en mi caso, el balance sería positivo.

* La terapia hormonal para la menopausia consiste en administrar estrógenos, con o sin progesterona, para aliviar los síntomas derivados del descenso hormonal. Si la mujer tiene útero, la progesterona es imprescindible. Más allá de los síntomas, cada vez más se habla del papel preventivo de esta terapia en aspectos como la demencia, la enfermedad cardiovascular o la osteoporosis.

De hecho, mi único arrepentimiento ahora mismo es no haber empezado hace un año o dos. El declive hormonal se nota mucho antes de la última regla, y me podría haber ahorrado algunas cosas.

En fin, la cuestión es que, de la mano de mi ginecóloga, empecé con la terapia hormonal en julio de 2025:

  • Progesterona micronizada en cápsulas. La tomo justo antes de acostarme porque puede causar un poco de somnolencia.
  • Estradiol en espray (aunque tengo pensado probar los parches). Lo aplico por las mañanas, después de dejar a mi hijo en el colegio, en la parte baja de la espalda. Esto del niño es importante, nunca jamás puede entrar él en contacto con este spray. Y lo aplico en esa zona porque después queda cubierta por la ropa.

Las dosis tienen que ser personalizadas en función de la persona y los síntomas, y pueden variar con el tiempo. Además, en ocasiones, se usan también otras hormonas, como testosterona o DHEA.

Test genético de perfil estrogénico

Cuando le expliqué todo esto a Núria Coll, enseguida me propuso hacernos juntas un test genético de perfil estrogénico. A ella le servía para conocerse (tuvo un mioma que terminó en intervención) e investigar de cara a este webinar de menopausia que, por cierto, va a ser una maravilla; y, en mi caso, para comprender cómo elimino los estrógenos y valorar mejor los posibles riesgos de una terapia hormonal.

Nos hicimos el test en Teletest, concretamente este que se llama GNT. Estrógenos. Se hace mediante una extracción de sangre normal y los resultados tardan 20 días (se consultan online).

Aplicaciones de este test:

  • Entender los trastornos reproductivos como el síndrome del ovario poliquístico, endometriosis, etc.
  • Seleccionar la terapia hormonal más adecuada.
  • Prevenir el desarrollo de ciertos tipos de cáncer.
  • Mejorar la salud ósea.
  • Controlar el impacto de los estrógenos en el sistema cardiovascular y/o en el sistema neurológico.
  • Ayudar en el diagnóstico de enfermedades estrógeno-dependientes.

Analiza los genes relativos a:

  • Fase I (detoxificación hepática)
  • Fase II (detoxificación hepática)
  • Estrés oxidativo
  • Transportadores
  • Receptores
  • Coagulación básica

Hasta donde yo sé, este test es algo privado que no está cubierto por la Seguridad Social. Probablemente no lo cubra tampoco ninguna mutua, pero eso es algo que tendrás que consultar.

Resultados

Los resultados son bastante indescifrables para el común de los mortales. Yo, personalmente, no entendí nada, así que hice lo que hacemos todos hoy en día: le pregunté a ChatGPT, y tengo que decir que me ayudó tremendamente a entender el informe.

Posteriormente le enseñé el estudio a mi PNI, Carlos González, y a la ginecóloca Laia Sánchez, y ambos me dijeron que el chat había acertado. Está claro que esto hay que valorarlo con un profesional de la salud, especialmente si hay suplementación de por medio, pero una primera explicación sí te la puede dar la IA.

Sin más preámbulos...

Esto es lo que aprendí al hacerme un test genético de perfil estrogénico

Si te agobian/aburren los nombres de los genes, lee directamente la interpretación de cada apartado.

Metabolismo de estrógenos – fase I

Los estrógenos se metabolizan principalmente por enzimas de la familia CYP450 en subproductos con distinta actividad estrogénica:

  • CYP1A1 y CYP1A2: metabolismo normal → convierten estrona/estradiol en 2‑hidroxiestrógenos (2OH E1/E2), que son menos estrogénicos y considerados protectores.
  • CYP1B1: metabolizador rápido → favorece la formación de 4‑hidroxiestrógenos (4OH E1/E2), que son más reactivos y pueden formar metabolitos genotóxicos si no se detoxifican bien.
  • CYP3A4: normal → forma 16α‑OH estrona, metabolito con actividad estrogénica alta.
  • CYP19A1 (aromatasa): normal → regula la conversión de andrógenos a estrógenos.
  • CYP17A1 (rs743572): metabolizador rápido → puede favorecer un mayor flujo hacia la síntesis de estrógenos.

Interpretación: mi perfil indica una tendencia a producir algo más de 4OH‑estrógenos y posiblemente una síntesis de estrógenos algo más activa.

Metabolismo de estrógenos – fase II (detoxificación y conjugación)

Aquí se neutralizan los metabolitos de fase I:

  • COMT: metabolizador pobre (Met/Met) → la metilación de catecol‑estrógenos (como los 4OH) a metabolitos inactivos está reducida. Esto puede acumular metabolitos potencialmente dañinos si no se compensan con nutrientes/cofactores.
  • MTHFR: polimorfismos presentes (rs1801133 AG = actividad reducida; rs1801131 TT = normal). La ruta de folatos influye en la disponibilidad de metilo, necesaria para que COMT funcione. Esto es algo relativamente frecuente, se calcula que le ocurre al 40 % de la población mundial, algo más en poblaciones mediterráneas e hispanas. Puede provocar unos niveles elevados de homocisteína, con todo lo que eso conlleva.
  • UGT1A1, UGT1A6, SULT1A1: normales → glucuronidación y sulfatación adecuadas, rutas de eliminación importantes.

Interpretación: mi punto más débil es la metilación por COMT. Aunque las demás enzimas de fase II están normales, puede haber cierta acumulación de catecol‑estrógenos.

Estrés oxidativo

  • GSTM1: ausente (Null/Null) → pérdida de capacidad detox por glutatión enzimático. Aluciné bastante con esto, la verdad, pero resulta que entre el 23 y el 69 % de la población mundial (depende de la población concreta)  vamos por ahí con este gen ausente. Missing, Not found.
  • GSTT1: intermedio.
  • SOD2 (rs4880): intermedio.
  • NQO1: normal.

Interpretación: mi sistema antioxidante es algo menos eficiente, por lo que es importante reforzar la defensa antioxidante a través de la alimentación y posiblemente suplementación.

Transportadores y receptores

  • SHBG (rs727428): transporte alterado, normal/aumentado → puede variar la biodisponibilidad de estrógenos.
  • SLCO1B1: transporte alterado (actividad disminuida).
  • ESR1 (receptor de estrógenos alfa): mayor densidad → puede aumentar la sensibilidad a estrógenos.
  • PGR (receptor de progesterona): normal. Bueno, algo normal por fin.

Interpretación: probablemente mis receptores de estrógenos son algo más sensibles, lo que amplifica la señal hormonal.

Coagulación

  • F2 y F5: normales → no hay variantes de riesgo trombótico (como factor V Leiden o mutación de protrombina). ¡Bien!

Interpretación: todo en orden en este sentido.

En resumen

  • Tendencia a mayor producción estrogénica
  • Exceso de metabolitos reactivos
  • Déficit para neutralizarlos
  • Menor defensa antioxidante 
  • Mayor sensibilidad tisular a estrógenos 
  • Protección parcial: vías de glucuronidación y sulfatación normales y sin polimorfismos protrombóticos.

La verdad que visto así, es un poquito drama. Pero recordemos que la terapia hormonal está indicada en mi caso, porque solo tengo 44 años, y además yo he decidido que es algo que quiero hacer para proteger mi salud ósea, cardiovascular y cerebral.

Este punto es importante para mí: esta terapia es algo que, aunque me da respeto, pongo en práctica con una buena predisposición.

Y mira, con lo hipocondríaca que soy y este test lo encajé de maravilla: siento que me ha dado una información muy valiosa.

Ahora sé dónde están los puntos débiles de mi genética y puedo aplicar medidas enfocadas a reforzarlos.

implicaciones prácticas en mi día a día

Verás que muchas de estas medidas son de cajón, todo el mundo debería aplicarlas, pero hay otras que sí son específicas de mi perfil genético.

  1. Apoyar la metilación:
    • Suplementación con 5‑MTHF (folato activo) y un complejo vitamínico con todas las vitaminas del grupo B. Esto segundo ya lo estaba haciendo. El folato lo incorporé en julio. Es importante que sea folato y no ácido fólico.
    • Asegurar proteínas de buena calidad y evitar déficits de zinc y magnesio. Todo en orden por aquí.
       
  2. Reducir formación de 4OH y promover 2OH:
    • Comer crucíferas con mucha frecuencia (brócoli, kale, coles de Bruselas). Check!
    • Valorar indol‑3‑carbinol y sulforafano, que favorecen la vía 2OH y reducen CYP1B1. Estoy tomando sulforafano.
    • Tomar té verde (EGCG) y cúrcuma, por su efecto modulador de CYP1B1. Tomo matcha a diario y muchos días añado una taza de té verde y otra de té rojo. Con la cúrcuma soy menos constante.
       
  3. Asegurar la eliminación intestinal:
    • Fibra soluble e insoluble, semillas de lino molido (lignanos que modulan estrógenos), psyllium. Check! Le doy muchísima importancia a la fibra en mi alimentación desde hace unos años.
    • Evitar estreñimiento (más tiempo de reabsorción de estrógenos). Todo en orden por aquí.
       
  4. Apoyo antioxidante:
    • Dieta rica en polifenoles: frutos rojos, granada, etc. Check!
    • Valorar suplementación antioxidante: vitamina C, ácido alfa lipoico, etc. Por mi lp(a) elevada (ese es otro temita genético que madre mía...), mi cardiólogo me recomendó 3 g diarios de vitamina C liposomada, así que eso ya lo estaba haciendo.
       
  5. Estilo de vida:
    • Mantener una buena composición corporal. Check!
    • Ejercicio físico regular. Entreno de lunes a viernes (fuerza, HIITs, etc.) y camino unos 12.000 (por el día a día de llevar al niño al cole, ir a buscarlo al mediodía para que coma en casa, ir al gimnasio, etc.) El fin de semana solo salgo a caminar, entre 8.500 y 10.000 pasos.
    • Sueño adecuado. Me acuesto temprano, entre las 22 y las 23 h.
    • Control del estrés (el cortisol interfiere con estas vías). Soy una persona bastante tranquila.
    • Evitar disruptores endocrinos (plásticos, pesticidas, cosméticos no naturales). Esto hace años que lo puse en práctica.

lo que he notado con la terapia hormonal en estos 3 meses

De la terapia hormonal espero beneficios a largo plazo, pero hay cosas que noté al cabo de días.

  • Mi sueño ha mejorado enormemente. Ya no me despierto de madrugada y tengo la sensación de descansar más profundamente.
  • La dispareunia (dolor durante las relaciones sexuales) desapareció en una semana.
  • No he vuelto a tener ninguna cistitis.
  • Siento que puedo concentrarme mejor, aunque este quizá sea el punto más subjetivo.
  • Noto la piel menos seca y no he vuelto a tener picores en los brazos.

¿Y ahora qué?

El siguiente paso es hacerme un análisis de metabolitos en orina, porque una cosa es la predisposición genética, pero otra lo que hace mi cuerpo con todo este batiburrillo de genes, más mi alimentación y mis hábitos de vida.

Lo haré pronto, tengo visita con mi ginecóloga dentro de una semana. También me haré otro análisis de sangre para ver cómo está todo.

Seguiremos informando.

VENTANA DE OPORTUNIDAD de la terapia hormonal para la menopausia

La terapia hormonal para la menopausia tiene una ventana de oportunidad, esto es, un período ideal para iniciar el tratamiento, que se ha definido como dentro de los 10 años posteriores a la menopausia y antes de los 60 años. Esta ventana parece optimizar los beneficios de la terapia y reducir los riesgos asociados.

Si estás planteándote este tema, coméntalo con tu especialista y valora la posibilidad de hacerte el mismo test genético que me hice yo. Posteriormente podrás valorar los resultados con tu PNI o ginecólogo/a.

¿Son las hormonas, la edad o tu contexto vital?

Si quieres profundizar en este tema y muchos otros relacionados con la menopausia y la perimenopausia, apúntate a este webinar gratuito que tendrá lugar el miércoles 29 de octubre a las 19:00 h.

Núria se ha rodeado de los mejores para un tema tan importante: el nutricionista y PNI, Pau Oller; la ginecóloga integrativa Laia Sánchez; la dietista y PNI Pilar Rodrigáñez, y la fisioterapeuta y PNI Laura Lucena.

Los principales puntos que se tratarán serán:

  1. Cómo interactúan las hormonas, la edad y el contexto vital en tus síntomas y calidad de vida.
  2. Cómo valorar si es mejor tomar terapia hormonal o no.
  3. Cómo la inflamación y el estrés oxidativo perjudican los niveles de óxido nítrico, el gran olvidado en la salud de la mujer.

Apúntate aquí, y si crees que a esa hora no lo podrás ver, apúntate de todos modos porque recibirás un vídeo del webinar que podrás ver durante unos días.